mi iphone: a sus órdenes. Continúa el artículo abajo

SI HACE UNOS AÑOS LE HUBIÉSEMOS DICHO A ALGUNA PERSONA QUE LLEGARÍA EL MOMENTO EN EL QUE NUESTRO MÓVIL SE CONVERTIRÍA EN UN ACOMPAÑANTE CASI OBLIGATORIO DE NUESTROS ENTRENAMIENTOS NO NOS HABRÍA CREÍDO. EN CAMBIO SALIR DEL PORTAL DE CASA DE LA FORMA QUE TE DESCRIBÍAMOS EN LA INTRODUCCIÓN DE ESTA SECCIÓN ES YA UNA TAREA DIARIA PARA MILES DE PERSONAS.

La evolución hasta llegar aquí ha venido rodada, casi de forma natural. Mirando hacia atrás en el tiempo, quizás algunos de nosotros empezamos a usar poco a poco el móvil lleno de canciones en mp3 (un Nokia quizás) conectado a unos auriculares para que nos hiciese más amena y motivada nuestras escapadas corriendo por el asfalto. Con el boom de los reproductores musicales fue el iPod quien se alzó como el verdadero amigo en estas sesiones de deporte. Poco después, con el desarrollo en prestaciones de los iPods llegó Nike con una buena visión de futuro e impulsó el uso de este dispositivo acompañado de sus sensores Nike+, unos pequeños emisores que se colocaban en los zapatos de la marca (o de otra cualquiera si teníamos imaginación) y que de esta forma hacían un rastreo de nuestros pasos, su ritmo, la distancia recorrida, etc. Para los que habíamos salido a correr en el pasado sin nada de esto, el cambio fue muy bienvenido, pues gracias a ello se sabía cuánto llevábamos recorrido en cada momento, podíamos pedir unos minutos de esfuerzo extra con alguna canción especial, etc.

 

Claro está, una vez que los smartphones se popularizaron, y los reproductores musicales mp3 empezaron su lento declive, estaba cantado que se convertirían en el aparato idóneo para alzarse como nuestro verdadero entrenador personal. ¿La razón? Aúnan en un solo producto todo lo necesario para estos menesteres, los ingredientes están servidos:

Música a nuestro antojo para endulzar nuestro esfuerzo: para Apple por ejemplo esta función está implícita en el iPhone, pues desde el mismo principio equipó al dispositivo con la desaparecida aplicación iPod que daba acceso también a la tienda iTunes Store.

GPS con el que hacer un seguimiento del recorrido: distancia alcanzada, velocidad alcanzada, etc. Gracias al sistema de posicionamiento vía satélite ya no es necesario utilizar sensores complementarios como los de Nike+, pues el propio móvil garantiza información vital durante el ejercicio.

Aplicaciones específicas para sacar todo el jugo a las dos características anteriores: este último aspecto es el que ha impulsado de verdad el uso del iPhone como entrenador personal. Gracias al buen hacer de algunos desarrolladores contamos en el App Store con grandes propuestas de las que os hablaremos más adelante.

Ahora sí, por todo lo anterior fijémonos bien cuando salgamos a la calle y veamos a alguien corriendo. En efecto, va equipado con un smartphone (¿un iPhone quizás?). Por eso conviene preguntarse: ¿qué necesito si yo también deseara utilizar el iPhone como mi entrenador personal? Y si somos de los que ya lo estamos haciendo, entonces proponemos otra pregunta: ¿cómo puedo sacarle todo el jugo a mi gadget cuando salgo a correr con él? Te invitamos a conocer las respuestas en los siguientes dos apartados.